El sol artificial más grande del mundo empezó a brillar en Alemania, precisamente a Jülich, el día 23 de marzo 2017.
Entre sus varios objetivos, esta instalación quiere desarrollar procesos de producción de combustibles solares, incluyendo el hidrógeno.
En las tres plantas del edificio Synlight, se encuentran 149 faros de xenón de arco corto que utilizan los alimentadores electrónicos EX200 GM3-E y los arrancadores AS-18040A.
Estamos muy orgullosos de haber participado a este importante proyecto y agradecemos a DLR (Centro de la Industria Aerospacial Alemana) por elegir IREM.